Forex Trading Secretos Revelados

Forex Trading secretos revelados Lo que el dinero no puede comprar Mientras trataba de ordenar mi bandeja de entrada, abrí un correo electrónico no leído enviado por un amigo probablemente antes de Nochevieja. Fue uno de esos tipo de cadena de correos electrónicos donde amenaza que la mala suerte caerá sobre usted si no se puede enviar a más de 20 contactos. Yo estaba a punto de eliminarlo (era sólo una pérdida de espacio de entrada de todos modos), pero decidió leerlo antes de enviarlo al olvido. El correo electrónico contiene un corto proverbio chino que ciertamente perforó algunos agujeros en mi personalidad. He leído en algún lugar antes y probablemente lo hizo demasiado, pero vamos a repasar sólo para asegurarse de que estamos hablando del mismo adagio. Con dinero: Podemos comprar una casa, pero no una casa. Podemos comprar un reloj, pero no el tiempo. Podemos comprar una cama, pero no dormir. Podemos comprar un libro, pero no un conocimiento. Podemos comprar un médico, pero no una buena salud. Podemos comprar una posición, pero no respeto. Podemos comprar sangre, pero no la vida. Podemos comprar sexo, pero no amor. Se siente culpable ¿no? Aquí estamos viviendo en este mundo, tratando tan duro de ganar más sólo para poder comprar una casa grande en un bonito o si no, en un barrio de lujo. Al hacerlo, ya no tenemos tiempo para pasar con nuestros seres queridos, especialmente con los niños (para aquellos que tienen hijos). No puedo dormir lo suficiente porque nuestros trabajos nos mantienen ansiosos por la noche. Compromiso de salud debido a la tediosa carga de trabajo y en algunos de los peores escenarios, olvidarse de respetar a los demás sólo para que podamos conseguir lo que queremos. Es una vergüenza, pero eso es lo que el dinero puede hacernos hacer a cambio de toda la felicidad material que proporciona. Pero todavía anhelamos tener más dinero en efectivo. Su como un fenómeno global que ha estado tomando el mundo por la tormenta desde el principio de la civilización. Los hombres han luchado por ella como animales. Supongo que la gente nace de esa manera. Parece que tenemos codicia incrustada en nuestro ADN. El proverbio me recuerda a una película de Nicholas Cage, The Family Man. En la historia, Cage interpreta a Jack Campbell, un hombre de negocios rico y poderoso en Wall Street. Seguramente estaba en la cima de su juego, pero una víspera de Navidad, Jack se dio cuenta de lo que había perdido debido a su insaciable hambre de riqueza. Perdió la oportunidad de estar con Kate, el amor de su vida. Perdió la oportunidad de convertirse en un buen padre para los niños Josh y Annie. Perdió la oportunidad de saber cómo es vivir una vida sencilla. Debido al dinero, perdí un tiempo precioso. Tiempo que debería haber pasado con mi padre. Y ahora, no importa lo mucho que tenga, nunca podré recuperarlo. Ni el tiempo que he perdido lejos de él. Y ni siquiera tengo hambre de poder como Jack. Simplemente trataba de vivir mi propia vida. Obviamente, el proverbio implica que el dinero no lo es todo. Hasta cierto punto, puede hacer que uno sea feliz, pero que la felicidad es sólo temporal. Lo que más importa son las cosas que el dinero nunca puede comprar: el hogar, el tiempo, el sueño, el vasto conocimiento, la buena salud, el respeto por los demás, el amor y la vida misma.